El Libro de Abraham |
Los “Libros Canónicos”, o los libros Mormones de escritura, incluye la Versión King James de la Biblia en ingles, la Versión Reina Valera en español, el Libro de Mormón, la Perla de Gran Precio y Doctrina y Convenios. La Perla de Gran Precio se compone de varios libros pequeños – el Libro de Moisés, el Libro de Abraham, José Smith-Mateo, José Smith-Historia, y los Artículos de Fe. El Libro de Abraham es posiblemente el mejor conocido de estos libros y ciertamente el mas polémico.
El Libro de Abraham, según los Mormones, Es el relato propio de Abraham de parte de su vida. El habla acerca de la idolatría de la sociedad en que vivió en, y acerca de escapar de ser sacrificio a los Dioses egipcios por un sacerdote. Jehová lo salva de muerte y el libro entonces habla de las bendiciones prometidas a Abraham y su descendencia. Después de esto, Abraham hablo de una visión que él tuvo por medio del Urim y Tumim, en que el Señor le enseña astronomía (inclusive el lugar de la morada de Dios) y muchas verdades del evangelio, inclusive la doctrina que hombres y mujeres vivieron con Dios antes que ellos vinieran a la tierra. La creación se es escribe con más detalle que lo que esta escrito en Génesis. El Libro de Abraham contiene también tres facsímiles, reproducidos de los papiros originales, interpretados por José Smith.
¿De dónde vinieron estos papiros? José Smith compró cuatro momias y papiros egipcios en 1835, en Kirtland, Ohio. ¿Quién vendió las momias? Un empresario que había oído que José podría traducir. Por este tiempo, la traducción y publicación de José Smith del Libro de Mormon era notoria. José inspeccionó los papiros e hizo unas pocas declaraciones que concordó con las opiniones de otros eruditos que los habían visto. Más allá de eso, sin embargo, Joseph encontró el registro de Abraham en los papiros. Esto entusiasmo mucho a José. El compró las momias y los papiros y empezó traducir. Este período de la Historia Mormona fue uno de acoso constante, pero José Smith completó su traducción en 1842 y lo publicó en el periódico Mormon, Times and Seasons, junto con los facsímiles. Esta traducción llegó a ser el Libro de Abraham. Joseph Smith pensó traducir más de estos papiros, pero la persecución interminable y, finalmente su martirio en 1844, lo previno. La esposa de Joseph, Emma, tuvo las momias y los papiros en Illinois cuando los mormones, como un grupo, se movieron al oeste a Utah. Ella finalmente los vendió y parte de ellos termino en Chicago – y se consideraron destruidos por el gran fuego de 1871. Pero en 1966, fragmentos de esos papiros fueron descubiertos en el museo Metropolitano de Nueva York. La Iglesia Mormona los adquirido y los puso en sus archivos.
Desde que se descubrieron estos fragmentos, ellos han llegado a ser un punto de debate entre Mormones y sus críticos. Egiptólogos hoy en día tendrían que ser mejores traductores que los eruditos en los días de José Smith, y muchos creen que estos egiptólogos pueden probar la traducción de José Smith de los papiros, y así, también su posición como un profeta. Los críticos dicen que dos cosas (entre unos pocos puntos) refutan la traducción de José Smith. Primeramente, los papiros tienen 2.000 años, no 4.000 años de edad, como declaro José Smith. Sin embargo, el contenido, fácilmente podría haber tenido 4.000 años, y haber sido copiado. El Nuevo testamento que tenemos hoy en día no se escribió exactamente en el tiempo de Cristo (los Evangelios fueron escritos décadas después de Cristo), pero aceptamos que nosotros probablemente no tenemos las fuentes originales que los escritores del Evangelio usaron (escritos y orales) y aun así los Evangelios contienen todavía el registro de Cristo.
Pero la crítica fundamental de los escépticos es de los facsímiles. Los jeroglíficos que se encuentran en los facsímiles no se traducen al titulo del “Libro de Abraham”. En vez de eso, ellos se traducen a “El Libro de Respiraciones”, un texto ordinario de entierro. Sin embargo, nosotros no tenemos mucho de los papiros originales de José Smith – se han perdido – y la descripción que tenemos de los papiros de Abraham no concuerdan con los fragmentos de Nueva York. De modo que el debate descansa en un punto muerto. Los críticos claman que la traducción de José Smith es falsa, y que los fragmentos no contienen el Libro de Abraham. Sin embargo, uno de los facsímiles fue encontrado, y esto es donde el debate se enfoca por ahora. Aunque los facsímiles sean imágenes, no jeroglíficos, se interpretan de forma distinta por eruditos modernos que la manera de José Smith.
Pero debemos mirar también más allá de las evidencias eruditas cuando se habla de la traducción de José Smith, y en el reino de la fe. Algunos mormones creen que el Libro de Abraham fue dado a Joseph Smith más por revelación que por la traducción literal del los jeroglíficos. El Libro de Moisés, en la Perla de Gran Precio, vino de la traducción de José Smith de la Biblia. Según la creencia Mormona, mientras José Smith revisaba el libro de Génesis, Dios le reveló pasajes largos, que no se encuentran en la Biblia. El Libro de Moisés es el resultado. También, la Sección 7 de Doctrina y Convenios se describe como una traducción de un documento escrito por el apóstol Juan. Sin embargo, José Smith no menciona haber encontrado un documento físico y, como el resto de Doctrina y Convenios, la sección puede haber sido una revelación directa dada por Dios. Las verdades que él reveló son lo esenciales para los Mormones, no la manera exacta en que las recibió. El propósito de la traducción nunca fue de presumir – La traducción fue un método de revelación.